Sobre mi práctica
Me interesan la abstracción, la experimentación y lo espontáneo. En cada obra aparecen problemas que busco resolver a través del propio proceso. Para mí, pintar es una cadena de decisiones que pueden abrir mil direcciones distintas. Cada trazo, cada gesto y cada decisión tomada en un instante quedan grabados en el lienzo como una forma de capturar el tiempo.
También trabajo con apuntes digitales que realizo en ordenador con el ratón. Esa herramienta me limita y a la vez me ofrece una libertad distinta, con un movimiento acotado que me ayuda a tomar decisiones. El entorno digital me sirve para ensayar ideas, colores y formas, y para probar ritmos. Después llevo algunas de esas piezas al lienzo. En esa traducción me tomo libertades que transforman la obra inicial y la hacen crecer en el plano físico.
Estudié diseño gráfico en la Escola Massana y ejerzo en ese ámbito. Desde 2017 me dedico también, de forma independiente, a la pintura.
Miguel Larraz